¿Menos es más en la belleza?

Ante una gama muy basta de productos y tratamientos de belleza, la tendencia es reducir en lugar de aumentar la aplicación de los mismos. ¿Quieres saber por qué?

 

Isabel Ramos y Begoña Sanjuán, fundadoras de Ayuna, Less is Beauty.
Isabel Ramos y Begoña Sanjuán, fundadoras de Ayuna, Less is Beauty.

 

Vivir en esta época nos tiene un poco malcriadas, porque hay un producto para cada necesidad, gusto o presupuesto. Ya nadie se puede quejar de no poder encontrar un labial rojo que le favorezca, de la misma manera que jamás podría decir que no hay marca que ofrezca la base de maquillaje perfecta para su piel o la mascarilla que deje lustrosa su melena. Hay, verdaderamente, una sobrepoblación de productos de belleza y las adictas a probarlos, como yo, nos hemos convertido en coleccionistas.

 

 

El problema es que mientras más amplia sea la gama de opciones, detalles y funciones, más complicada resulta la elección. Piensa en cuando tienes un proyecto con un cliente y después de semanas de meditar, hacer lluvia de ideas y seleccionar las opciones más poderosas, tienes que dosificar lo que vas a proponerle en la junta final. Si llegas con 30 posibilidades no sólo diluyes el impacto y corres el peligro de que las propuestas más fantásticas se pierdan entre el montón, sino que es posible que tu cliente elija una que ni siquiera debió quedarse en la lista a presentar. Es más, si tienes a más de una persona que va a tomar la determinación, es probable que pasen las horas discutiendo cuál es la mejor y nunca se pongan de acuerdo. Bueno pues, ahora imagínate que eso es lo que sucede cuando están en una tienda departamental o un sitio especializado en el que hay una variedad tan grande de productos que ni la empleada que te atienda sabe distinguir las cualidades, beneficios y necesidades que cubre cada uno. ¿Eso no te provoca dudar de la verdadera utilidad de cada línea dentro de una misma marca? Es más, ¿no te hace sospechar que se trata de un mecanismo de mercadotecnia? Pues no eres la única.

 

 

Ahora, si te decides por una línea, digamos, la de piel madura reseca que cuyo tratamiento es anti edad, se te presentan varias opciones también y la especialista que te atiende en el mostrador o que te hace el facial, propone que después de la limpieza sigas con un aceite, procedas con un gel y termines con la fórmula más densa, para después rematar con el protector solar. La suma de estos productos puede rebasar tu crédito en la tarjeta, pero el punto sería saber si tiene un efecto similar en tu piel. Las españolas Begoña Sanjuán e Isabel Ramos piensan que sí. Ellas deben tener algo de razón en vista que cuentan con una trayectoria estupenda trabajando en la industria de la belleza y pudieron entender que la cantidad no es equivalente a la calidad y mucho menos a los resultados. Así que estas dos ex compañeras de trabajo, y amigas, decidieron revolucionar el modelo de negocio que ha multiplicado los productos y confundido a los usuarios, por uno cuyo lema es clarísimo: menos es más. La marca que crearon en el 2017 se llama Ayuna, Less is Beauty y se lanzó en la Indie Beauty Expo revolucionando el cuidado cutáneo. Desde entonces, ha sido galardonada con reconocimientos importantes como Beauty Shortlist, los Clean Beauty Awards y los Premios Fuera de Serie.

 

 

Esta marca abandera el ayuno cosmético al mismo tiempo que se consolida en el sector eco-lujo, que resulta muy atractivo para las millennials. En esta nueva tendencia conocida como Clean Beauty, Sanjuán y Ramos, han podido sumar una línea de belleza sostenible de alta gama. Pero, ¿qué es el ayuno cosmético? Se le conoce también como ayuno por vía tópica y según avanzados estudios, está demostrado que darle a la piel un tiempo sin productos de belleza es una sana manera de hacerla respirar, activar su capacidad natural de regenerarse y evitar una sobre estimulación innecesaria. Por ello, Sanjuán y Ramos se han avocado a aplicar los avances de la biotecnología para desarrollar tratamientos cuya química verde supone una revolución cultural, muy a tono con los que las mujeres deseamos, al usar ingredientes orgánicos y vegetales. De hecho, ya existe una palabra para identificar a las personas que desean fórmulas libres de componentes sospechosos que cuiden su piel y el medio ambiente: Skintellectuals.

 

 

Ante esta demanda, Ayuna no sólo ha cuidado su botánica pura libre de pesticidas o herbicidas y sus productos sostenibles y ecológicos, sino que también ofrece un empaquetado reciclado y reciclable: desde su caja en cartón corrugado, hasta sus contenedores elaborados con urea y celulosa que hacen que la huella de carbono y el consumo energético de cada tarro sea muy inferior a los elaborados con plástico.

 

 

Yo tuve la suerte de conocer a Begoña Sanjúan y de ponerme en sus manos para el masaje y el facial más relajante y nutritivo que he tenido en la última década con los productos de Ayuna que puedes encontrar dentro de México en: Le Blanc Spa Resort en Cancún, Palace Resort en Los Cabos, así como en Matilda en Ciudad de México. Internacionalmente, desde luego, también están disponibles en Neiman Marcus, Four Season, The Derox Market, Nose Paris, BeautySaur Organics, Soft Surroundings y en Aire Ancient Baths con The Vegan Experience by Ayuna.

 

Algunos productos que no te puedes perder son:

 

 

 

Si sientes que tu piel también necesita un descanso, es importante que recurras a la filosofía de menos es más con productos saludables no sólo para ti, sino para el medio ambiente. La Clean Beauty no es para todas, pero es perfecta para una mujer con mentalidad moderna y ecológica.

#Knowtherules  #Breaktherules

 

Fotografías: cortes